domingo, 28 de junio de 2009

La nostalgia en los huesos de Londres.

Transitaba Londres con nostalgia, creía en la magia de los pájaros al bailar y en una energía extraña que no se llamaba Dios. Cada paso hacía eco en su alma, como si interiormente no tendría más que órganos tiesos y venas exhaustas de sangre caliente.
Las nubes ensayaban un monólogo contra la superficie y ella aún no comprendía el inglés, ni la vida. Un puñado de almas destrozadas la rodeaba. Londres es una bonita ciudad para sacar a pasear el dolor.

6 comentarios:

m a r i e dijo...

Todas son buenas para ese fin.

Jessi dijo...

no solamente londres sirve para eso,, hay muchass mas qe tbm lo logrann
besos ,, hermoso tu texto como siempre
suerte!!

BLUEKITTY dijo...

Londres, Londres... qué ciudad!

Tavo dijo...

Paso a saludarte... Muy bueno lo escrito

Saludos Tavo

Anónimo dijo...

Sería lindo sacar a pasear el dolor en una ciudad en la que no me conozca nadie. Una por ahí se limita a expresar lo que duele a los seres más cercanos o nos lo guardamos para nosotras mismas, bien adentro.
Sería lindo.

Virginia dijo...

Muy buena descripción de un pequeño pero doloroso momento. Besos Agos. Mucho que no pasas por mi blog. :)